Entre las muchas dudas que pueden tener los padres y madres primerizas se encuentran las relacionadas con la caca de bebé. Así que en el artículo de hoy te contamos todo lo que debes saber sobre la caca del bebé, cuándo las deposiciones son normales y cuándo debemos alarmarnos.

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¿Qué tener en cuenta?

La caca de bebé va cambiando conforme el niño o la niña crece y va incorporando nuevos alimentos a su dieta. Por lo que a lo largo de todo este tiempo es normal que surjan preguntas sobre si la caquita del bebé es normal, o en cambio nos está indicando algún problema de salud.

Para valorar si la caca del bebé es normal o no, hay que valorar aspectos como la edad y la alimentación (toma leche materna, leche de fórmula o ha incluido ya alimentos sólidos)

La consistencia de la caca de bebé

La consistencia de la caca de bebé es una de las cosas a tener en cuenta para valorar si la caquita del bebé es normal.

• Bebés que toman leche materna: La consistencia de las cacas de un bebé lactante son prácticamente líquidas.
• Bebés que toman leche de fórmula. La leche de fórmula puede generar digestiones más lentas, con lo que la caca puede ser algo más consistente. Pero dado que el bebé se alimentará exclusivamente de líquidos, es normal que las deposiciones también lo sean.

Si se observa que en cualquiera de los dos casos la consistencia es más dura y seca, hay que valorar si el bebé come suficiente, o si está eliminando demasiado líquido por el calor, por fiebre o algún otro problema de salud.

Cuando los niños comen alimentos sólidos, las heces también se volverán más consistentes. En caso de estreñimiento evitar alimentos que fomenten el problema e incluir más variedad de alimentos naturales ricos en fibra en la dieta.

El color de las caquitas del bebé

La alimentación del bebé y la edad son factores que influyen en el color de las cacas de bebé.

Estos son los colores de caca de bebé más frecuentes:

• Caca negra o verde oscuro. El meconio, la primera caca del bebé, está formada por todos los desechos que se han ido formando en el intestino del feto durante su desarrollo. Lo normal es que esta primera caca se deposite en el hospital, al poco de nacer.
• Caca color mostaza y consistencia cremosa. El meconio cambia de su color oscuro, a un tono amarillo/verdoso, hasta llegar al color normal de la caca del bebé: El color mostaza con grumitos. Esta es la caca normal de un lactante que toma el pecho.
• Caca amarilla y muy líquida. Cuando la caca está más liquida y amarilla de lo normal es posible que se deba a algún problema de salud. Habrá que vigilar si además se dan vómitos o pérdida de peso.
• Caca verde en bebé. El color de la caquita del bebé también puede variar según la alimentación de la madre. Una caca de color verdoso y cremosa no es motivo de un problema de salud, pues entra en la normalidad. En el caso de que la caca tenga una consistencia más mucosa, puede que el bebé tenga un tránsito intestinal acelerado.
• Caca marrón y consistente. Al incorporar nuevos alimentos es normal que la caca de bebé tenga un aspecto marrón y se vuelva más consistente. Al principio es habitual que el niño sufra estreñimiento, por lo que en principio no hay motivos para alarmarse. Su pequeño intestino aún trabaja algo lento y se está habituando a la comida nueva.
• Caca con alimentos no digeridos. Si las cacas del bebé son de varios colores mezclados y con alimentos visibles es posible que este tenga algún problema en el intestino. Es recomendable consultar con el pediatra.
• Caca marrón-rojiza, con restos de sangre. Este es otro de los casos en los que es conveniente consultar con los especialistas. Es posible que el bebé sufra gastroenteritis bacteriana u otro trastorno.

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